jueves, 4 de noviembre de 2010

JUGAR A JUGAR

La observación es maravillosa; ¿por qué no jugamos los adultos?
Hacemos todo siempre por algo concreto, no por puro placer...

Los niños juegan porque les da la gana.
Y yo, ¿por qué voy a ir a asomarme a mi alameda?... si no tengo nada que hacer allí...
¿Por qué voy a jugar a enamorarte?... si total no me ves...

¿Por qué enredaré mi dedo en un mechón de mi pelo?
¿Por qué voy a cantarle una coplilla al levante...? ¿Para qué? ¿Qué saco yo con eso?

Tengo que irme, amontono estas palabras y me duermo. Mañana trabajo.
¿Para qué voy a jugar con tus esencias? Es tarde ya.

¿Y la lluvia? ¿Y la arena? ¿Qué hacen esperándome si no voy a ir a jugar con ellas?
No voy a saltar en los charcos, ni dejaré jamás a la arena deslizarse entre mis dedos...

Faltan cosas en la nevera; mañana hay que hacer la compra... La hago, y vuelvo.

Se me olvidará entonces jugar a besarte, a morderte los labios sabrosos. No jugaré a imaginar tu lengua relamer el gusto que dejo. ¿Para qué?

¿Por qué?
¡Qué tontería jugar porque sí!

Y jugar a amontonar palabras...
Palabras monótonas, montones de palabras. Montañas, pequeñas, palabras montadas... De nata, con bata, tontonas palabras.
Labrando mantitas de tamañas palabras... Bastardas que montan, palabras con nata...

Jugar... a las palabras...

5 comentarios:

Carmen dijo...

Se ve que andas elucubrando sobre la clase de ayer, desde luego fue para pensarla, estuvo muy interesante.

Que nunca nos falten las ganas de jugar!!!

Cuenticiente dijo...

Ando elucubrando (no pensando)

Anónimo dijo...

!!Qué ricas tus palabras con nata!!!Fita

Cuenticiente dijo...

Gracias amiga, un abrazo.

Equilibrista dijo...

Me encanta el juego y tu texto ^^ lo de la mantita de palabras y las palabras con nata

juguemos, yo sí que juego, y mucho :)