lunes, 5 de julio de 2010

AGUA DE ROSAS


-"Yo tenía los ojos muy grandes... y se me quedaron así de chiquititos de tanto llorar..."-decía mi heroína de las manos desolladas y del poquito pan.

-"Por las noches subía a la azotea, y allí me hartaba de llorar. Yo nunca quise pastillas."-decía la rosa azul de hielos eternos, guerrera de piel más blanca.

-"La última vez que le ví, su cara estaba en la luna"-decía un rescoldo de la candela.

El perfume de las rosas es la atalaya de una fortaleza.

Los sabores de su templo pétalos de ambrosía.

Para ganar su frente debe el amor besar primero sus pies, allí se encuentran sus caminos.

Si sus manos alcanzan tu pecho una diosa te acaricia...

Y así debes verla siempre, que el regalo de sus aguas te sacará de la tierra...

porque el agua de las rosas siempre vendrá del cielo.

Porque el corazón de una mujer es tan sagrado como su vientre.

4 comentarios:

genialsiempre dijo...

Bueno, chiquilla, estás que desbordas poesía por tus poros, y qué calidad...bravo!! otra!!

Cuenticiente dijo...

Soy una niña, sólo miro con ojos de niña. Y cuanto más tiempo pase, más esperanza me vestirá. ¿Es muy grave doctor?

Pedro Estudillo dijo...

Se ve que las calores te inspiran una barbaridad. No entiendo mucho de poesía, pero este poema me dice muchas cosas y me gusta.
Sigue derramando letras así.

Un beso.

Cuenticiente dijo...

Vaya, Pedro, gracias. Yo soy la que menos idea tiene de poesía... Vamos a dejar en que le pongo sentimiento, jeje.
Gracias, y arriba las mujeres, que son fuertes aunque siempre exista alguien que lo quiera poner en duda.
Besote.